Es importante guardar especial cuidado al
especificar la carga en créditos ECTS de el conjunto de
asignaturas del master, indicando en su caso los diferentes
itinerarios formativos que contiene el master y cómo se
estructuran estos a través de asignaturas obligatorias y
optativas. Además, es imprescindible aplicar adecuadamente los
créditos europeos o ECTS. Aún hoy es habitual encontrarse
con casos que miden la carga docente en horas de profesor e incluso
que utilizan mal los créditos ECTS.
La duración total de una titulación,
independientemente del esquema de 3+2 o 4+1, es habitualmente de
una duración múltiplo de 60 créditos ECTS, con
masters de 60 o 120 créditos (en algunos países es la
única alternativa legal). Sin embargo existen numerosas
excepciones a esta tendencia, incluso dentro del programa Erasmus
Mundos.
Si bien en Bolonia se plantea la
obtención del nivel de master al superar los 300 ECTS,
también se acepta que algunos estudios de postgrado de alta
especialización requieran una duración superior. Esto se
plantea por ejemplo en titulaciones multidisciplinares de alta
especialización (ej. ingeniería biomédica) en cuyo
primer año se centran en las asignaturas básicas (ej.
áreas de salud ó técnicas) que se requieren para
poder profundizar adecuadamente en un segundo año.
En lo que respecta a la distribución de
créditos por cursos, la regla general es la de adaptar la
carga docente a los 60 créditos ECTS de máximo anual, y
cualquier caso que exceda esta medida excepcionalmente (por
ejemplo, el tipo de prácticum que puedan requerir condiciones
excepcionales.) debe justificarse en términos de carga docente
que pueda ser excesiva para el estudiante pero que sea
imprescindible debido a las características del master. Por
ejemplo, algunos postgrados justifican duraciones de hasta 90 ECTS
en un curso por condicionantes del tema que tratan, sobre todo por
la naturaleza de las prácticas que se ofrecen: por
prácticas en empresa, por utilizar laboratorios exclusivos,
temáticas que por periodo del año lo requieren (como
ciencias forestales).
La relación de asignaturas del master debe
corresponder con la estructura general del mismo para todos los
itinerarios formativos posibles, de forma que la suma de todos los
créditos anuales respecte el límite de 60
créditos.
En definitiva, cualquier característica que
se salga de la norma habitual de los 60 ECTS y equitativamente
distribuidos a lo largo de un curso debe ser justificada y
razonada.
Casos habituales de mala utilización de
los ECTS
Además del caso más habitual de no
respectar la normal de los 60 ECTS anuales con aportar una
justificación razonable, los siguientes son otros ejemplos
habituales de mal utilización de los ECTS:
- El
sistema ECTS se compagina con la descripción de las
competencias y habilidades que se deben adquirir a lo largo de la
asignatura/módulo/titulación. No se debe entender
meramente como una escala de medición del tiempo.
- Las
calificaciones ECTS se describen con porcentajes, y simbolizan el
rendimiento del estudiante dentro del ranking de su grupo de la
asignatura. Es decir, las calificaciones ECTS no son números
absolutos, y siempre existirán algunos estudiantes con la
calificación A, incluso aunque no haya estudiantes que hayan
obtenido un sobresaliente en ese mismo grupo. La vocación del
grado ECTS es que se proporcione como complemento a la nota
obtenida en cada institución.
- Los
créditos ECTS son precisamente créditos, y no puntos
extra a obtener en la calificación final de una
asignatura.
- Al
asignarse una carga en créditos ECTS a un proyecto de fin de
master, a menudo algunas propuestas de titulaciones intentan darle
excesiva ó poca carga relativa en la carga total de los
estudios. Una carga docente del 50% del total de créditos en
un master es en la mayoría de los casos excesivo.
- No es
razonable describir las asignaturas en créditos ECTS con
valores muy pequeños e incluso con valores decimales (ej.: una
asignatura A con 1 crédito de duración, o otra asignatura
B que tiene un total de 13,2 créditos ECTS). Aunque este tipo
de cálculos tan exactos estén permitidos no son
realistas, es imperativo aclarar una estructura tan peculiar y por
qué motivo no se sigue la recomendación habitual de que
las asignaturas tengan una longitud múltiplo de 3
créditos ECTS.
Prácticas en empresa y ECTS
En caso de que se vayan a desarrollar
prácticas en empresas u otro tipo de instituciones, debe
explicarse claramente el peso que esta actividad va a tener en la
carga académica en términos de ECTS (Importante para
conocer el grado de implicación de la propia industria en la
formación de los estudiantes así como en la
tutorización).
Si no se especifican claramente estos aspectos muchas veces las
posibilidades de prácticas en empresa no se consideran
realistas.